Por: Seminarios Imagen
La recién aprobada Ley de Transformación y Flexibilidad Laboral (Ley Núm. 4 de 2017) llega para abonar a los retos actuales en Puerto Rico. Esta ley modifica regulaciones y beneficios bajo el amparo de las anteriores Leyes 148 de 1969 y Ley 180 de 1998, por lo que puede presentar grandes dificultades para su implementación a los administradores de recursos humanos.
Jaime M. Núñez, experto en Recursos Humanos, identifica dos grandes retos relacionados a beneficios en este proceso de implementación de la llamada Reforma Laboral:
- Desde el punto de vista de procesos, la ley permite dos tipos de acumulaciones por vacaciones y enfermedad. Los viejos empleados deben gestionarse bajo la premisa de que acumulan sus 15 días de vacaciones y sus 12 días por enfermedad.Mientras que los nuevos empleados bajo las regulaciones de la Reforma Laboral habrán de tener acumulaciones escalonadas. Enel caso de empresas con 12 empleados o menos, se acumulan solamente seis días por año sin incremento futuro. Los admninistradores de recursos humanos de grandes empresas enfrentan ahora el reto de organizar y discernir lo conjunto, que aplique a todos los empleados, y aquello diverso bajo nuevas normativas, en dos sistemas distintos y simultáneos.
- El segundo gran reto, que todavía no vemos en toda su magnitud, es el impacto que estos cambios puedan tener en la psiquis de los miembros de la organización y cuán identificados se sientan con ella. Cuando hay una persona nueva con acumulación desventajada y diferente a los empleados más longevos, queda por ver cómo se afecta su nivel de compromiso y cómo esto impacte la productividad a largo plazo en las organizaciones.
Además, queda bajo la prerrogativa del patrono el determinar el máximo de beneficio (la nueva ley limita sólo en mínimo). Cualquiera que sea su determinación, envía un mensaje a la plantilla de empleados que sin duda afecta sus niveles de identificación y compromiso.
El que estos cambios no redunden en un alza en los niveles de movilidad laboral a mediano o largo plazo depende de cuán diligentes y eficientes sean los administradores de recursos humanos ahora. Deben estar preparados para cuando la prerrogativa del patrono en la otorgación de beneficios se convierta en un elemento de negociación en el proceso de reclutamiento. Es por esto, entre otras razones, que la capacitación de los profesionales de Recursos Humanos juega un papel determinante al establecer el márgen de diferenciación competitiva entre las empresas.
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